El 3 julio de 1535, partió hacia Chile desde Cuzco, la gran expedición de Diego de Almagro compuesta por 500 españoles y 10.000 nativos de Perú. Recorrerían durante dos años el territorio que le había concedido el emperador Carlos I de España en 1534, aunque la noticia llegó después de su partida. De las dos rutas posibles hacia Chile por los caminos del Inca que partían del Cuzco, Almagro elegiría la que bordeando el lago Titicaca se internaba en la actual Bolivia, pasaba por las provincias argentinas de Jujuy, Salta y Catamarca y cruzaba a Chile atravesando la cordillera de los Andes. Desecharía la ruta costera que atravesaba el desierto de Atacama, por el peligro de perder allí a sus caballos por la falta de agua y forrajes.
En su avance por la cordillera, los expedicionarios sufrirían muchas penalidades, ya que caminaban agotados por el frío, el congelamiento de sus manos y pies, y por la dificultad de un suelo lleno de guijarros pequeños, de bordes afilados, que les destruía las suelas de los zapatos y las herraduras a los caballos. Llegarían al valle de Copiapó (Copayapu), recogiendo los víveres que le suministraron los indígenas, pasarían por los valles de Huasco y Coquimbo y se detendrían en el río Itata.
La vuelta por el desierto de Atacama sería tan horrorosa, como la travesía por la cordillera; días quemantes y noches heladas, la hostilidad de los indígenas y escasez de agua y alimento, aunque de cualquier forma la consideraría mejor que la travesía por los Andes. Entraron en el Cuzco dos años después de la partida, el 8 de abril de 1537.
Tal sería el estado físico en que llegaron Almagro y sus seguidores, que desde entonces se denominó «rotos de Chile» a quienes vinieran de esas tierras. Este termino es usado en la actualidad en el país, haciendo mención al «roto chileno» por su espíritu aguerrido y esforzado. Cuatro años más tarde se atrevería Pedro de Valdivia a emprender a la conquista del Reino de Chile. De este modo, el nacimiento del Chile actual se encuentra en el Cuzco, que era el corazón del Imperio Inca y base de la expansión española por los territorios de estos siguiendo el camino del Inca.